Tras arrancar el curso con altibajos, los Utah Jazz parecen haber alcanzado cierta regularidad en las últimas semanas, y esta madrugada han dado un golpe sobre la mesa en su visita a Los Ángeles. Los de Snyder vencieron a los Clippers por 107-120, sumando así su octavo triunfo en los últimos diez partidos, lo que les sitúa como el equipo más en forma del Oeste junto a los Denver Nuggets. De hecho, llevarse este duelo directo no solo les refuerza anímicamente, sino que les sitúa relativamente cerca de los angelinos y comienza a asentarlos en el vagón de cabeza de la conferencia.
La victoria de los de Salt Lake City se debió en gran medida a su sensacional final de partido. Su gran trabajo defensivo frenó por completo a los de Doc Rivers, que solo pudieron anotar cuatro tiros de campo en el último cuarto y no lograron ni un solo punto en los últimos tres minutos y medio, lo que dio lugar un parcial final de 0-11. De esta forma, los Jazz se permitieron cerrar con cierta comodidad un choque de lo más competido y que supone su primera gran victoria a domicilio de lo que va de temporada.
Un Kawhi irreconocible
Gran parte del mérito defensivo de Utah pasa por reducir al mínimo la aportación de las superestrellas de los Clippers. Paul George no pudo pasar de los 20 puntos tras encestar solo 6 de sus 20 lanzamientos a canasta, mientras que Kawhi Leonard estuvo incluso peor, pues se quedó en 19 tantos con un 6/24 en el tiro, y sus 36 minutos en cancha se saldaron con un -23 para los suyos.
Tampoco estuvo fino Lou Williams, gran referente de la segunda unidad dada la baja de Montrezl Harrell por enfermedad, aunque su desacierto no le impidió acabar como máximo anotador entre los suplentes angelinos con 16 tantos. En ausencia de su socio habitual, su gran apoyo fue Landry Shamet, autor de 13 puntos gracias a su 4/5 en triples.
Clarkson no tarda en destacar
A nivel ofensivo, el mejor de los Jazz fue Donovan Mitchell, que terminó con 30 puntos, 9 asistencias y 7 rebotes en su haber. El escolta estuvo bien apoyado por los 17 tantos de Bojan Bogdanovic y los 15 de Joe Ingles, que repartió además 8 asistencias, aunque en general todos los integrantes del quinteto inicial de Snyder funcionaron muy bien y fue en ellos en quienes se cimentó el triunfo. Los suplentes, por contra, tuvieron más problemas, con una única excepción.
Esa fue Jordan Clarkson, que ha necesitado muy poco para hacerse notar. En su segundo partido como jugador de Utah, el ex de los Cavaliers firmó 19 puntos partiendo desde el banquillo, cifra que ningún otro suplente de la plantilla ha superado en toda la temporada y que confirma su capacidad para funcionar como revulsivo en la segunda unidad. Habrá que ver cómo evoluciona su rendimiento con el paso de los partidos, pero no hay duda de que si es capaz de mantener esta aportación los Jazz han ganado mucho con su llegada.
(Fotografía de portada: Andy Lyons/Getty Images)
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