Tan solo se ha completado un mes de competición pero Giannis Antetokounmpo recopila ya motivos –y actuaciones– de sobra para conquistar su segundo premio consecutivo al MVP de la temporada. El griego completó una estratosférica actuación en la que se fue hasta los 50 puntos y 14 rebotes con la que literalmente destrozó (122-118) a unos serios Jazz incapaces de hallar forma de frenar el vendaval. Y todo ello cuidando con mimo la bola. Cero pérdidas de balón y 17º doble-doble consecutivo del jugador para seguir haciendo historia.
No importó que Khris Middleton y George Hill no estuvieran presentes por lesión. No importó que Eric Bledsoe se viera severamente limitado por un problemas de faltas durante la primera mitad. No importó que los Jazz anotaran 21 triples, repartieran 29 asistencias y completaran un gran partido en lo colectivo. Todo eso fue insuficiente para evitar que Antetokounmpo regalara la octava victoria consecutiva a los Bucks.
Eso sí, tuvieron que sudar. Y mucho. Los de Mike Budenholzer tuvieron problemas para entrar en juego, con el propio Giannis errando sus cuatro primeros intentos desde el triple y cinco de sus primeros seis lanzamientos desde el tiro libre. La defensa no conseguía ajustar su producción y los Jazz se adentraron en el ecuador del tercer cuarto con una ventaja de diez puntos. Pese al mal día de Mike Conley, la maquinaria colectiva de los de Quin Snyder funcionaba. Bodganovic –24 puntos– y Mitchell –20 puntos– lideraban la ofensiva y la segunda unidad mantenía un alto ritmo durante todo momento. Pero entonces cambió todo.
En un esfuerzo sobrehumano, Antetokounmpo lideró dos parciales de 10-0 que transformaron por completo el encuentro llevándolo al otro lado de la balanza. A 2:13 para el final del partido, el griego se marchaba al banquillo visiblemente exhausto tras darle el control del partido a su equipo. Sin embargo, en apenas un par de posesiones, los Jazz aprovecharon su ausencia para sumar ocho puntos consecutivos y ponerse a solo tres puntos de distancia. Sin tiempo para descansar, Antetokounmpo regresó a la pista y anotó otros cuatro puntos vitales. Mitchell lo intentaría nuevamente, pero la rebelión sería mitigada por una acción de Bledsoe y un Brook López que se interpuso en el camino del propio escolta cuando pretendía finalizar una bandeja a cinco segundos para el final.
Quin Snyder se rinde ante la actuación de Antetokounmpo
La actuación de Antetokounmpo no ha pasado desapercibida para nadie, despertando la admiración y los elogios de sus rivales. Quin Snyder, entrenador de los Jazz, no dudó en alabar el gran partido firmado por el griego, quien les privó de sumar la que hubiera sido la cuarta victoria consecutiva de los de Salt Lake City.
“Es un jugador excelente. Hizo exactamente todo lo que es capaz de hacer”, declaró el técnico después del partido. “Creo que incluso anotó cuatro triples, así que cuando está a ese nivel hay muy poco que hacer contra él. Creo que hicimos un muy buen trabajo tratando de mantenernos entre él y la canasta. Milwaukee es un gran equipo y Giannis demostró por qué es el MVP en la segunda mitad. Pero no creo que se lo pusiéramos fácil. Respondimos realmente bien hasta esa última posición y mantuvimos la compostura todo el partido.”
Asumida la decepción, los Jazz tendrán la oportunidad ahora de recuperar la senda de la victoria. Este fue el primer partido de una gira lejos de casa que les llevará a enfrentarse a Indiana, Memphis, Toronto y Philadelphia en los próximos siete días.
(Fotografía de portada de Harry How/Getty Images)
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